Es jugadora de Banco Provincia y vivió la experiencia de jugar hockey universitario en Estados Unidos.
– ¿Cómo surgió la posibilidad de irte a Estados Unidos a estudiar y jugar hockey universitario?
– Me fui casi sorpresivamente, no lo tenía planeado. Me salió la chance en un verano, por contactos llegué a Estados Unidos a jugar al hockey universitario. Me impulsó a salir de mi país, salir de mi zona de confort, vivir algo diferente a lo que me esperaba. Yo terminé de jugar el mundial junior de Chile, en agosto de 2017 me fui a Estados Unidos y estuve hasta noviembre de 2019 jugando en Michigan.
– ¿Cómo fue la adaptación?
– La adaptación fue fantástica. La primera noche allá me pregunté “por qué me metí en esto?” pero una vez que arranqué la pretemporada con el equipo me sentí bien, me tomaron como una más.
– ¿Y a nivel deportivo es muy diferente?
– Allá no es el mismo hockey, tienen un sistema deportivo totalmente diferente, se relaciona todo con la universidad. Tu vida ronda en la universidad, en mi caso era Michigan. En un mismo complejo tenés todo lo necesario. El nivel universitario es el hockey más alto, no hay clubes, la mayoría de las jugadoras termina su carrera hockistica cuando se reciben en la universidad. Una vez que te recibís ya no podés jugar más en el hockey universitario, no hay jugadoras, por ejemplo, de más de 24 años.
– ¿La forma de jugar al hockey es similar?
-Tienen un hockey más físico que acá en la Argentina, nosotros tenemos un juego más habilidoso. Son juegos muy diferentes. Allá entrenan en pretemporada seis horas diarias en dos turnos y se hacen pocos dinámicos. La temporada es de septiembre a noviembre, el resto de los meses se entrena. Además, es difícil explicar allá lo que es una cancha de arena, porque no hay ninguna que no sea de agua. Me costó al principio, pero luego me fui adaptando.
– ¿Qué es lo que más te costó dejar en los años que te fuiste?
– Extrañé a mis amigos, a la familia. Me costaron mucho las fiestas, extrañé los sábados de club que allá no existen, no hay terceros tiempos. Fue difícil irme de Banco Provincia, me costó dejar al club.
– ¿Sentís que estos años en el exterior te hicieron cambiar a nivel personal?
– Si, maduré mucho en esta experiencia, vivir sola y adaptarme, el rol que pude tomar allá fue otro, estaba más asentada en el equipo, fui capitana los últimos dos años. Cuando me fui, era la más chica de Banco y en Estados Unidos tenía otro rol, de más grande, de liderazgo.
– ¿Qué planes tenés para lo que viene?
– Mi intención es estar acá en la Argentina, jugar un año entero con el club, quiero volver a jugar play off, y luego irme a Europa. Lo tengo en agenda como una decisión ya tomada. En el Seleccionado Nacional no lo sé si volveré a jugar, viví una experiencia fantástica, pero iré viendo cómo se desarrolla todo.